Para las amantes del brushing en días ocupados, que buscan un resultado óptimo a un menor costo, nuestras brochas de brushing están hechas para usted! Descubra los gestos perfectos para un brushing exitoso.
Opte por la mejor de las brochas
Consciente de que una buena brocha es tan beneficiosa como un tratamiento nutritivo, hemos perfeccionado nuestra técnica para crear productos respetuosos con su cabello y con el medio ambiente.
Además, los pelos de jabalí fortalecen, aportan brillo al cabello con un uso diario, estimulan la circulación sanguínea y favorecen el crecimiento.
Así que con nuestras brochas, ya no es necesario arruinarse en cosméticos: déjese seducir por sus beneficios naturales.
Cada cabello es único y merece lo mejor.
Por eso le proponemos una gama de cuatro brochas redondas, disponibles en varios tamaños y adaptadas a una longitud de cabello específica: 35, 45, 55 y 65 mm de diámetro.
No dude en consultar nuestro artículo dedicado a este tema para ayudarle en la elección de su brocha.
Los buenos gestos a adoptar
1. El pre-secado: un paso importante
El paso más delicado es el pre-secado, ya que el brushing debe hacerse sobre cabello limpio y húmedo.
Después de aplicar un tratamiento nutritivo o su champú habitual, pre-seque su cabello para eliminar la máxima humedad. De hecho, cuanto más secos estén los cabellos, más efectiva será la absorción de productos para protegerlos del calor.
La sutileza de esta etapa es mantener suficiente humedad para no dañar tu fibra capilar.
Para cabellos finos y lisos
Si deseas tener volumen de manera natural, esta técnica te cambiará la vida. Prepárate con un secador de pelo ajustado a temperatura media y seca la cabeza hacia abajo. Con tu mano, relaja simultáneamente tus raíces estirándolas ligeramente, para alisarlas y aumentar el efecto volumétrico deseado.
Para cabellos densos
Puedes limitarte a enrollar tu cabello en una camiseta de algodón. Este material tiene la particularidad de ser dos veces más absorbente que una toalla clásica y es más respetuoso con la fibra capilar.
2. La preparación del cabello
Una vez dominado el pre-secado, aplica un tratamiento nutritivo y protector de calor, luego desenreda tu cabello con el cepillo. Los pelos de jabalí permitirán una distribución homogénea de los productos a lo largo de toda la longitud y te ayudarán a realizar un brushing suave y voluminoso.
Con un peine, traza una raya y luego separa tu cabello en varias secciones. Puedes distinguirlas unas de otras gracias a las pinzas, para facilitar el resto del brushing.
3. La etapa del brushing
Prepárate con el cepillo de brushing y el secador de pelo.
Para un brushing liso
Acostúmbrate a siempre comenzar por los mechones de abajo.
Selecciona un mechón de aproximadamente 2 cm de ancho, que desenredarás con el cepillo, comenzando desde la raíz. Repite el gesto, esta vez acompañado de tu secador de pelo para amplificar el efecto alisador. Coloca el cepillo dentro del mechón y el secador del otro lado, evitando pegarlo al cabello, ya que el calor debilita enormemente la fibra capilar.
Insiste en las raíces para aportar aún más volumen y repite la operación con el resto del cabello. Para fijar el resultado, puedes pasar un chorro de aire frío sobre los mechones.
Según la longitud de tu cabello, adapta tu gesto: gira el cepillo durante todo el proceso si tienes el cabello corto, o solo en las puntas para el cabello largo.
Para un brushing rizado
Enrolla tu mechón de cabello alrededor del cepillo, subiendo gradualmente de las puntas a la media longitud y sopla simultáneamente aire tibio para que tu cabello tome la forma del cepillo.
Para este brushing, es preferible utilizar dos cepillos: uno con un gran diámetro para alisar y despegar las raíces, y uno con un diámetro más pequeño para definir hermosos rizos.
Relájate y haz lo mismo en el resto de la cabeza.
Sigue siendo la directora de orquesta, así que no dudes en confiar en ti misma. Trabaja en armonía con tu cepillo y respeta el movimiento natural de tu cabello para estilizarlo de la mejor manera. Finalmente, una vez terminado, aplica unas gotas de aceite de almendra dulce para realzar el resultado.
