¿Cómo proteger el cabello en verano?
El verano es sinónimo de sol, playa y relajación... pero también de agresiones para nuestro cabello. A menudo olvidados, sin embargo, sufren de lleno los efectos del sol, la sal, la arena y el viento. Resultado: cabello seco, quebradizo, opaco y dañado.
En la playa, es habitual aplicarse protector solar en la piel para protegerse de los UV. ¿Pero qué pasa con el cabello?
Afortunadamente, existen soluciones simples y efectivas para proteger su cabello y mantenerlo en plena forma durante todo el verano.
1. Desenrede su cabello
Tenga el reflejo de desenredar bien su cabello antes, pero sobre todo después de nadar. Para evitar que se dañen y se enreden entre sí. Esto también le permitirá eliminar la mayor cantidad de residuos de su fibra y así limitar los impactos negativos de la sal y la arena.
Este gesto se recomienda especialmente para el cabello rizado o encrespado, que tiende a tener más nudos. De hecho, una vez mojado, es mucho más fácil peinarlo. Así podrá secarse libremente y sin problemas.
Consejo: Prefiera un peine de dientes anchos para desenredar el cabello mojado.
2. Mojarlos antes y después del baño
Para evitar que su cabello absorba una cantidad excesiva de sales, le sugerimos mojarlo antes de entrar al agua. Al estar ya hidratado, los riesgos de absorción de agua salada se reducen considerablemente. Así podrá disfrutar de su baño sin preocupaciones. También se recomienda enjuagar su cabello con agua clara entre cada baño. Esto permite eliminar todos los residuos absorbidos y así proteger mejor la fibra.
Para los menos atrevidos, puede optar simplemente por una alternativa simple y efectiva: recoger su cabello en altura para evitar cualquier contacto con el agua.
Consejo: También puede preparar un agua de enjuague casera a base de vinagre de manzana o jugo de limón para neutralizar la cal y aportar brillo a su cabello.
3. Protéjase del sol
Al igual que la piel, el cabello es sensible a los rayos UV, por lo que es importante no exponerlo demasiado durante el día. En dosis altas, los rayos pueden resecar la fibra, alterar el pH y, a la larga, provocar problemas capilares más complicados, como la aparición de caspa.
Así que no dude en usar un sombrero, una bufanda o una gorra para reducir la exposición del cabello al sol y así proteger al máximo su fibra.
Consejo: También puede usar un spray protector capilar a base de filtros UV.
4. Hidrate en profundidad
El sol, la sal y el viento tienden a deshidratar el cabello. Para nutrirlo en profundidad, aplique regularmente una mascarilla o un acondicionador hidratante.
Consejo: Deje actuar la mascarilla al menos 20 minutos antes de enjuagarla. Para un efecto aún más intenso, envuelva su cabello en una toalla caliente durante el tiempo de actuación.
5. Mantenga una alimentación saludable
Como saben, nuestra alimentación influye en el estado de salud de nuestro cabello. Comer de manera variada y equilibrada es la mejor manera de fortalecerlo y proporcionar una protección natural adicional.
Lo mismo ocurre con la hidratación, que es un aspecto a no descuidar. Con el aumento de las temperaturas, tendemos a sudar más y, por lo tanto, a eliminar toda el agua ingerida. Mantenerse bien hidratado es esencial durante este período.
Ten en cuenta que tu higiene de vida se refleja en la vitalidad de tu cabello, así que asegúrate de cuidar de ti.
6. Peinados protectores
En verano, los peinados protectores ofrecen numerosas ventajas para preservar la salud del cabello frente a agresiones externas como el sol, el calor y el mar. Estos peinados, como trenzas, twists, braids y moños, permiten reducir la manipulación diaria del cabello, minimizando así la rotura y las puntas abiertas. También protegen el cabello de la deshidratación al retener la humedad, lo cual es importante durante los meses cálidos cuando el cabello es más propenso a secarse.
7. Tratamientos naturales para un cabello saludable
Además de los gestos diarios y de los productos capilares adecuados, también puedes utilizar tratamientos naturales para proteger tu cabello durante el verano.
El aceite de coco: Rico en ácidos grasos nutritivos, el aceite de coco es un excelente tratamiento para el cabello seco y dañado. Aplícalo como mascarilla antes del champú o déjalo actuar toda la noche para un tratamiento intenso.
El aloe vera: El aloe vera es un hidratante natural con propiedades calmantes. Es perfecto para calmar las irritaciones del cuero cabelludo e hidratar el cabello en profundidad. Aplica un gel de aloe vera en tu cabello después del champú o úsalo como leave-in.
El vinagre de manzana: El vinagre de manzana es un excelente desenredante y un acondicionador natural. Permite neutralizar la cal y dar brillo al cabello. Diluye vinagre de manzana en agua y enjuaga tu cabello después del champú. Sin embargo, según su naturaleza, tu cabello no tendrá las mismas necesidades en verano en cuanto a protección. Por lo tanto, es importante ser consciente de esto para saber cómo cuidarlo y no causar más problemas capilares.
Siguiendo estos consejos simples, podrás proteger tu cabello del sol, la sal, la arena y el viento y mantenerlo saludable durante todo el verano. No olvides elegir productos capilares adecuados a tu tipo de cabello y mimar tu cabello con cuidados naturales.
